lunes, 9 de marzo de 2009

Bloody Mary

Ya me he reconciliado con el Bloody Mary, haciendo un par que nos estuvieron muy buenos.

La receta es fácil: a pesar de que se considera importante el orden de la mezcla de los ingredientes, simplemente los mezclé todos y luego enfrié. Además, sustituí con éxito el tabasco que no tenía, por una guindilla introducida en el vaso.

Creo que hay dos claves: la salsa Worcestershire, muy sabrosa y que además le aporta algo de picante, y batir bien la mezcla con hielo en la coctelera: de esta manera, a parte de enfriarla mucho, al incorporarse el agua derretida de los cubitos, hace que el espeso zumo de tomate quede más líquido, como se espera en una copa.

Ingredientes:
  • Zumo de tomate (2/3)
  • Vodka (1/3)
  • Sal
  • Pimienta negra
  • Tabasco
  • Salsa Worcerstershire
  • Un poco de zumo de limón

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es incomparable, deberían hacer una serie que se titulase Bloody Mary, o al menos una consola de videojuegos. Lo de la guindilla es un puntazo, a esa foto sólo le faltan unas judías.

Mucho Cierzo dijo...

Que conste que el zumo de tomate lo compré con la intención de hacernos unos bloody maries si venías el día de mi cumpleaños.

Espero que, por lo menos, te pique un poco la conciencia.